LANDSCAPES

Esta entrada es solamente para mí.

Todavía no me creo que me esté atreviendo a escribir esto, pero (quizás equivocándome, para variar) quiero (aunque yo lo llamaría más bien "necesito") creer que cada letra a la que estoy dando forma se convertirá en una pequeña parte de un hipotético manual de primeros axilios sobre autoayuda.

Está todo en mi cabeza... Pienso demasiado. Pienso cuando no debería. Todo es psicológico. Es un engaño. Tengo una famila fantástica. Unos padres que me quieren, un hermano envidiable. Tengo una gata preciosa que me hace olvidar que estoy solo. Tengo una buena vida. Mis amigos me aprecian aunque sea un hijo de puta. Vivo mejor de lo que mucha gente querría. Y sin embargo, incomprensiblemente me encuentro vacío.

Estoy casi completamente convencido de sufrir "insatisfacción crónica". Leí acerca de ello el otro día, buscando en Google. Es como si todo lo que sintiese, saliese de mí sin conseguir arraigar. ¿Lo entiendes ahora, "J"? Ahora entiendes lo que decía Nacho Vegas: « […] esa patología del espíritu […] , el doble don de la sensibilidad suficiente para apreciar las cosas buenas y sencillas, y la absoluta incapacidad para disfrutar de ellas ». Ahora lo ves todo. Cada vez que me levanto de la cama me viene a la cabeza la misma idea: no estoy viviendo, sólo estoy matando el tiempo. Las horas perdidas, perdidas sin ningún fin, sin ningún objetivo concreto. Sólo se pierden y no vale la pena preguntarse dónde irán a parar. No le veo el sentido a vivir para esto.

¿Sabéis una cosa? Os envidio. Os envidio a todos. Os envidio cuando os veo por la calle, y veo que hacéis una vida normal, que reís y lloráis como todo el mundo, que tenéis vuestras alegrías y vuestras preocupaciones... Os envidio porque cada vez estoy menos convencido de poder discernir entre todas esas cosas como lo hacéis vosotros. Y os odio... Creedme cuando digo que os odio. Os odio a todos. Y me desprecio a mí mismo por odiaros. Y lo más enfermizo es que me regocijo en mi propio tormento.

Necesito vacaciones. "Vacaciones de mí mismo", como cantaba "N". Dejar la mente en blanco, no pensar en nada. Algunas drogas ayudan, alterando la memoria a corto plazo. De todas formas tan sólo es una tregua. Una tregua química. Aunque últimamente agradezco esas treguas más que nada en este mundo.

Tengo que aliviar mi cabeza, ponerlo todo en orden. De nada sirve tener la cabeza llena si el resto de mí está vacío. Hay que saldar el debe y el haber, equilibrar la balanza. Y cuando esté vacío del todo, podré ver dónde está el desperfecto y así, quizás, conseguiré remendarlo y poder volver a convertirme en un Ser Humano...




Socorro...